A NUESTRA MADRE PIDIENDO LA VIDA DE LA VOLUNTAD DIVINA

21.08.2015 14:48

A NUESTRA MADRE BENDITA PIDIÉNDOLE QUE

NOS DE LA VIDA DE LA VOLUNTAD DIVINA

 

          Virgen Inmaculada, tómame sobre tus rodillas maternas y hazme de Madre; con tus santas manos aduéñate de mi voluntad, purifícala, plásmala, caliéntala al contacto de tus dedos maternos; enséñame a vivir únicamente de Voluntad Divina.

          Mamá hermosa, encierra en mi alma la Voluntad Divina

          Reina Soberana, con tu Imperio Divino derriba mi querer, para que surja en mí la aurora de la Divina Voluntad.

          Reina poderosa, domina mi voluntad y conviértela en Voluntad Divina.

          Celestial Mamá, tómame en tus brazos y escribe en mi corazón:

¡FIAT!            ¡FIAT!            ¡FIAT!

          Reina triunfadora, arrebátame mi voluntad y cédeme la Divina.

          Reina del Cielo, hazme un poseído de la Voluntad Divina.

          Mamá Santa, enciérrame en tu Corazón, para que de Ti aprenda a vivir de Voluntad Divina.

Celestial Mamá, derrama tus lágrimas en mi alma; para que curen las heridas que me ha hecho mi     voluntad.

          Reina de la Paz, obtenme el dulce beso de paz de la Divina Voluntad.

          Mamá del Cielo, haz que surja en mi alma el alba y la aurora de la Voluntad Divina.

          Reina potentísima, róbame el corazón para encerrarlo en la Voluntad de Dios.

          Mamá y Reina, enciérrame en el sagrado Templo de la Voluntad de Dios.

          Reina poderosa, concédeme las armas para hacer guerra a mi voluntad.

          Emperadora del Cielo, comunica a mi alma el beso de la Voluntad de Dios.

          Virgen de la Encarnación, pronuncia otra vez tu “FIAT” para que viva en mí la Voluntad de Dios.

          Mamá de Jesús, hazme también a mí de Mamá, y guíame por el camino de la Divina Voluntad.

          Mamá Santa, visita a mi alma, y prepara en ella una digna morada de la Divina Voluntad.

          Mamá mía, encierra en mi corazón al Niñito Jesús, a fin de que reine en mí con su Divina Voluntad.

Mamá Santa, derrama las lágrimas de Jesús en mi corazón, para preparar en mí el triunfo de la Divina Voluntad.

Mamá querida, graba en mi corazón el Santísimo Nombre de Jesús, para que me dé la gracia de vivir siempre de Voluntad Divina.

          Mamá del Cielo, cúbreme con tu manto y enciérrame en la Voluntad Divina.

          Mamá mía, pon en mi corazón a tu pequeño Jesús, para que El forme el Reino de la Divina Voluntad.

          Jesús, María y José, haced que viva con vosotros, en el Reino de la Divina Voluntad.

          Mamá Santa, hazme perder para siempre mi voluntad, para vivir sólo en el Divino Querer.

Mamá Santa, ven a mi alma y haz el milagro de convertir el agua de mi voluntad humana en el vino nuevo de la Divina Voluntad.

Mamá Divina, tus enseñanzas y las de Jesús desciendan a mi corazón y formen en mí el Reino del Querer Divino.

Las llagas de Jesús y los dolores de mi Mamá me den la gracia de que mi voluntad resucite en la Voluntad Divina.

          Mamá querida, por la Resurrección de Jesús, tu Hijo, hazme resucitar en la Voluntad de Dios.

          Mamá querida, con tu poder triunfa en mi alma, y hazme renacer en la Voluntad de Dios.

Mamá del Cielo, derrama en mi corazón el fuego y las llamas del Espíritu Santo, que consuman en mí y quemen todo lo que no es Voluntad de Dios.

          Mamá Celestial, guarda mi voluntad en tu Corazón, y encierra en mi alma el Sol de la Voluntad Divina.