ACTOS COMPLETOS

21.08.2015 14:24

Cada cosa creada posee de lo nuestro, pero no para sí, sino para

darlo a las criaturas, pero deben vivir en nuestro Querer, de otra manera las

puertas están cerradas y a lo más gozan los efectos, pero no la plenitud de

los bienes que hay en nuestras obras, por eso hija mía, para ser completo y

perfecto el acto de la criatura debe comenzar y terminar en nuestra Voluntad,

la cual le suministra su misma Vida de luz y de Amor, para hacer que el acto

sea completo y nada le falte de bello, de santo y de bueno. Si el acto no

comienza en nuestra Voluntad, falta el orden, la santidad, la belleza, y por lo

tanto el acto humano no puede ser firmado con la firma de nuestro Querer

como acto suyo. Es para llorar hija mía el ver tantos actos humanos

trastornados, desordenados, quedados algunos al principio, algunos a la

mitad, algunos a los que les falta un punto, y otros a los que les falta algún

otro, y lo que es peor aún, alguno ensuciado con fango, alguno con

podredumbre, alguno como empapado en la culpa, que no hacen otra cosa

que irritar nuestra justa Justicia, por eso, sin nuestra Voluntad no puede

haber bien en la criatura, y si parece que hacen algún bien, es bien aparente,

y como falta la sustancia de la Vida de nuestro Fiat no puede ser duradero,

basta con que surja un obstáculo, un disgusto, y el bien termina y se

arrepienten de haberlo hecho. En cambio, todo lo que se hace en mi

Voluntad posee firmeza irremovible, y delante a los disgustos y obstáculos

no se detienen, sino que corren de más para dar la vida del bien que poseen.

 

Ahora, tú debes saber que quien hace sus actos en nuestro Querer,

hace actos completos y perfectos, en cambio quien vive siempre en Él, se

encuentra bajo una lluvia continua de luz, que conforme se mueve, late,

respira, así le llueven encima todos los efectos y variadas bellezas de nuestra

luz divina; nuestro Ser Divino es Luz purísima, luz interminable, encierra

todos los bienes posibles e imaginables; mientras es luz es palabra, y toda

ojo mira dondequiera, no hay cosa que se pueda esconder de Nosotros; esta

Luz es obra, es paso, es vida que da vida a todo y a todos, esta Luz encierra

bellezas que no se agotan, alegrías y felicidad sin fin. Ahora, quien vive

siempre en nuestro Querer Divino se encuentra bajo la lluvia de luz de

nuestra palabra imperante y creante, y ¡oh, cómo la transforma nuestra

palabra! Le habla siempre de nuestro Ente Supremo y produce todos

nuestros efectos divinos sobre la criatura, con tal variedad de bellezas, que

Nosotros mismos quedamos admirados. Nuestra mirada de luz la mira

siempre, nuestro paso corre siempre hacia ella, nuestras obras con sus brazos

de luz la abrazan y se la estrechan al seno, y todas le llueven luz para

comunicarle nuestra mirada de luz, nuestras obras y pasos de luz. Así que

quien vive siempre en nuestro Querer está siempre en comunicación directa

con su Creador, y recibe todos los efectos que sabe producir un Dios. En

cambio quien obra en Ella está en comunicación con nuestras obras, y las

suyas vienen modeladas con nuestras obras."